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Coincidiendo con la llegada de los primeros cernícalos primilla tras su invernada africana, hace pocos días estuvimos en Mérida para hablar sobre algo que nos interesa mucho y en lo que trabajamos desde hace años: la conservación de este pequeño halcón migrador en las zonas urbanas. El pasado 15 de febrero asistimos a la primera reunión del Comité Científico del LIFE Zepaurban, un proyecto avalado por la Unión Europea cuyo principal objetivo es desarrollar un modelo de gestión de las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) urbanas en Extremadura que asegure la conservación del cernícalo primilla a largo plazo y que sea aplicable a cualquier zona urbana que albergue colonias de la especie.

LIFE Zepaurban se inició en septiembre de 2016, durará cuatro años, cuenta con un presupuesto de mas de 2'5 millones de euros y lo coordina la Junta de Extremadura, junto a varios organismos, empresas y asociaciones. En esta primera reunión en Mérida se abordaron los criterios metodológicos adecuados para el desarrollo de las acciones preparatorias del proyecto que comenzarán este mismo año, como serán el marcaje con tecnología GPS de ejemplares o el censo de colonias.

La implicación de GREFA con la población urbana de cernícalo primilla en Extremadura se materializa en las acciones que hemos llevado a cabo en localidades declaradas como ZEPA para la especie como Trujillo, Guareña y Fuente de Cantos o las que planeamos desarrollar en Plasencia, Cáceres y Llerena, entre otras. Uno de los puntos fuertes de nuestro trabajo ha sido la instalación de nidales en los silos agrícolas para crear y consolidar colonias reproductoras de cernícalo primilla.

Precisamente de regreso de Mérida hicimos una parada en Trujillo y pudimos confirmar que los cernícalos primilla que crían en los silos de esta localidad ya han llegado y se disponen a iniciar su temporada reproductora. Pudimos contar unos veinte ejemplares, la mayoría machos, y alguno incluso marcado al haber sido anillado en su día como pollo. Volvimos de tierras extremeñas con la primavera ya dando señales de vidas y toda nuestra ilusión y competencia enfocada en la recuperación a gran escala del cernícalo primilla, una especie que vuelve a ser una preocupación de primer orden entre quienes nos dedicamos a estudiarla, seguirla y conservarla a tenor de los declives registrados en sus poblaciones en los últimos tiempos.

Es un momento clave para esta pequeña y bella rapaz, con la que estamos más comprometidos que nunca para que su recuperación no se detenga o retroceda.

Fuente: GREFA - Grupo de Rehabilitación de la fauna autóctona y su hábitat